Asma: Identifica factores desencadenantes de crisis
El Asma es una Enfermedad Crónica de la vía aérea inferior a nivel bronquial, lo que se traduce como una obstrucción variable y reversible.
Factores desencadenantes de la enfermedad
Los agentes causantes de las Crisis Asmáticas son principalmente virus, como los rinovirus o el virus respiratorio sincicial. Existen otros factores que pueden desencadenar estos episodios como la exposición a contaminantes, por ejemplo el humo de tabaco o la combustión de leña.
Agentes menos conocidos
Existen otros factores desencadenantes de Crisis Asmáticas menos conocidos, como los alérgenos de la primavera que incluyen: pólenes, hongos ambientales, caspa de animales (perros y gatos principalmente) y ácaros presentes en el polvo de la habitación.
La crisis desencadenada por la actividad física se conoce como Asma Inducida, que puede afectar a personas sin tratamiento o diagnóstico previo de Asma. La Obesidad, especialmente en mujeres, se considera un factor que complejiza el control del Asma. Este problema se presenta ya que, el contenido graso, presenta secreción de algunas hormonas que contribuyen a la persistencia de un estado inflamatorio de la vía aérea y del cuerpo en general.
Recomendaciones para identificar factores de riesgo
Debido a que los factores de riesgo son múltiples, se recomienda llevar un adecuado control del Asma con personas especialistas en Neumología o Broncopulmonares. El seguimiento consiste en asegurar que la persona tenga adherencia al tratamiento. Algunas recomendaciones generales incluyen:
- Evitar la exposición al humo del tabaco
- Evitar la exposición al humo de la combustión de leña o carbón
- Mantener un peso adecuado
- Realizar actividad física acorde a sus capacidades físicas
- Realizar test de sensibilización alérgica
- No dormir con mascotas
- No tener peluches
- Sacudir periódicamente los espacios en los que habita
Acudir a una valoración médica
Es importante acudir a un servicio de urgencias ante la presencia de algunos de los siguientes síntomas:
- Opresión Torácica
- Falta de aire
- Retracción de partes blandas a nivel costal
- Dificultad para hablar
- Dificultad para alimentarse
- Voz entrecortada
- Tos Crónica
- Tez azulada
- Palidez
Finalmente, es importante considerar que el tratamiento debe ajustarse según la evolución de la persona con Asma. Estos cambios tienen que ver con la disminución progresiva del consumo de medicamentos según la adherencia y someterse a terapias inhalatorias cuando se considere necesario.