Cirugía de Hiperplasia Prostática Benigna
Artículo escrito por Dr. Rodrigo Ledezma
La Cirugía de la Hiperplasia Benigna de la Próstata en algunos casos está indicada. La gran mayoría de los pacientes pueden ser tratados con fármacos, los cuales tienen buenos resultados, pero en ocasiones no es suficiente y probablemente el Urólogo indique la Cirugía.
La Cirugía puede ser realizada por diferentes métodos. En general, cuando son próstatas de tamaño pequeño o mediano, se hacen Cirugías de Mínima Invasión a través de la uretra, denominada Resección Transuretral de la Próstata. Cuando son de mayor volumen se recomienda la Cirugía Abierta, en la cual se extirpa la parte del Adenoma, que es el crecimiento prostático benigno que obstruye el paso de la orina.
Recientemente se han introducido una serie de tratamientos mínimamente invasivos que:
1- Mejoran la recuperación del paciente
2- Disminuyen el riesgo de complicaciones, las cuales son de tipo hemorrágicas, es decir, pérdida de sangre mayor a lo común, lo cual se asocia a riesgo de tener que realizar una transfusión sanguínea
3- Tienen menor estadía hospitalaria
Esto se ve con la Cirugía Abierta, cuando son próstatas de más de 80 centímetros cúbicos.
Técnicas de Láser
Otra técnica es la utilización de un Láser, mediante la cual se puede realizar una extirpación parcial de la próstata denominada Enucleación Endoscópica de la Próstata, que puede ser realizada con alternativas como:
- Láser de Tulio
Y posteriormente esto puede ser extirpado completamente con buenos resultados a largo plazo.
Esta Cirugía, afortunadamente, no tiene límite de tamaño, salvo casos excepcionales. Puede ser realizada en una próstata de hasta 200 centímetros cúbicos con gran seguridad. Además, corta la estadía hospitalaria de siete días a dos.
Así mismo, disminuye la tasa de complicaciones. Estas alternativas están disponibles en el país y son buenas opciones en tratamientos de invasión mínima en el tratamiento de la Hiperplasia Prostática Benigna.