Desarrollo Neurológico Infantil
El desarrollo neurológico infantil es importante ya que define las características físicas y sociales del niño. Debe haber una evaluación constante en los primeros meses de vida del bebé y, en caso de notar anomalías, acudir al neurólogo pediatra para hacer un diagnóstico acertado y conciso
Dr. Rizzoli Córdoba
El desarrollo infantil es un proceso de cambio en el cual el cerebro de los niños evoluciona y va adquiriendo habilidades y procesos cada vez más complejos de sentimientos, emociones, pensamientos y relaciones con los demás; abarca desde el embarazo y hasta los 6 primeros años de vida, es un periodo muy importante porque es donde se desarrolla cerca del 95% del cerebro y la forma y los circuitos que se desarrollan en esa etapa es como la persona se va a comportar el resto de la vida.
Como un ejemplo de ello: Una persona que a los 4 años le amarraban las agujetas y nunca aprendió a hacerlo, de adulto le va costar trabajo amarrarlas; una persona que cuando era pequeño no le hablaban de forma clara o no le decían por su nombre como tal, en etapas adultas, cuando le hablen por su nombre de pila, se puede sentir agredido o agredida o no reconocerlo; otro ejemplo es una persona que en la etapa adulta siempre llega tarde y le cuesta trabajo establecer compromisos, puede ser la causa se origine en los primeros 5 años de vida y en la forma de comportarse, por eso el desarrollo infantil es muy importante para ayudar a cada niño a alcanzar su máximo potencial.
Áreas del desarrollo infantil
Las áreas del desarrollo infantil son 5:
La primera parte es la motora. Tiene que ver con el movimiento del cuerpo y lo que permite que los niños y las niñas puedan llegar a jugar, correr, subir escaleras, bajar; pero también dibujar y escribir y también el arte además de poder hacer cosas en la coordinación ojo-mano. Los problemas más comunes durante esta etapa pueden ser que el niño no lee porque puede que no vea bien, para eso es importante una valoración médica especializada para descartar problemas de la vista; también puede ser que tenga problemas del movimiento, y ahí se requiere una evaluación neurológica para descartar que haya alguna parte del cuerpo que tiene un movimiento limitado.
Otra de las áreas del desarrollo es la parte de la comunicación, esta involucra tanto oír y escuchar como poder llegar a hablar, Lo más común es ver que a los niños se les consiente y no se les habla de forma clara, o se les adivina el pensamiento y no es posible que expresen sus ideas, pero también es importante el descartar que tengan problemas auditivos o alguna problemática en el cerebro que haga que los niños no puedan atender y entender las instrucciones que se les dan. Otro de los puntos importantes a descartar en esta área es que haya problemas en la cavidad bucal o en los músculos, tanto de la lengua como la garganta, que causen que no haya una buena pronunciación, en este caso existen tres áreas que están relacionadas con cómo se comportan los papás o los adultos significativos para los niños, que son la parte personal social, que tiene que ver con la interacción con adultos, niños y el rol social que ocupan.
También está la parte de autocuidado y responsabilidad personal, que es lo que va a permitir que los niños en etapa adulta puedan valerse por sí mismos y hacer sus cosas, y también está la parte cognitiva, para ello se requiere de hacer una evaluación diagnóstica para ver cuál es el nivel de habilidades que tienen cada una de estas áreas y así poder hacer un plan para que cada niño alcance su máximo potencial.
Evaluación
Todos los niños deben de tener una evaluación del desarrollo como parte de las actividades que realizan los médicos que los atienden y les dan el seguimiento, la importancia de esto es porque así se puede detectar de forma oportuna algún problema e ir a una valoración adicional. Como parte de estas herramientas está la prueba “evaluación del desarrollo infantil”, entre otras.
¿Cuándo hay que ir con el neurólogo pediatra con motivo de problemas en el desarrollo?
Cuando el médico o el pediatra identifica que el niño no está haciendo lo que le toca ni lo de su grupo de edad anterior a través de una prueba de tamizaje. Posteriormente la consulta por neurología pediátrica es la que va diagnosticar si realmente existe o no y si se requieren estudios adicionales, en general, el estudio que se utiliza para corroborar problemas en el desarrollo es una evaluación diagnóstica, que puede ser realizada por personal de psicología. Desde el punto de vista médico los estudios que se requieren dependen del tipo de caso, no existe ningún examen de laboratorio o gabinete que hagan el diagnóstico de problemas en el desarrollo. El problema se detecta a través de la consulta, los estudios de imagen, como tomografía y resonancia, que pueden ser muy importantes para ayudar al médico a saber cuál es la estructura del cerebro y si existe ahí algún tipo de problema.
Signos de alarma para acudir con el neurólogo pediatra
Los niños tienen que empezar a hablar y articular palabras a partir del año, si un niño habla muy consentido, parece que entiende todo, pero no tiene un vocabulario de más de 100 palabras a los 2 años, o no dice frases como “mamá quiero leche” o hace sonidos aislados, puede ser un indicativo de que tenga problemas en la comunicación y para ello se requiere consulta. También si los niños hacen berrinches excesivos y desplantes en los centros comerciales, no pueden esperar su turno y es muy difícil manejarlos, puede ser otro indicativo para ir a consulta. Otra de las cosas que hay que vigilar y tomar en cuenta es que los niños menores de 1 año no tengan contacto con los ojos y con la mirada de los papás, que estén aislados, que no hagan mucho ruido y que parezca que no hubiera un niño en la casa.
De forma adicional, si los niños están teniendo problemas para mover alguna parte del cuerpo o no están moviendo sus ojos de forma adecuada puede ser indicativo de algún tipo de problema. Finalmente, si al entrar a la escuela le cuesta trabajo mantener la atención y es hiperactivo, puede ser otro de los indicativos de algún problema que requiera una valoración.
La mayor parte de estos casos puede ser manejados brindando consejería y descartando una enfermedad, pero la valoración por neurología pediátrica es muy importante para ver cuál es el diagnóstico preciso y, a partir de ahí, estructurar un plan de tratamiento y de manejo para que cada niño alcance su máximo potencial.