Impacto de la Estenosis Raquídea en la movilidad y calidad de vida
La Estenosis Raquídea genera síntomas como Dolor Lumbar, Claudicación Neurogénica y limitación de la movilidad.
La Estenosis Raquídea es una condición caracterizada por el estrechamiento del canal raquídeo, el cual alberga la médula espinal en la zona cervical, dorsal y los nervios que se dirigen hacia las extremidades inferiores en la zona lumbar.
Se trata de un origen degenerativo, lo que implica un crecimiento articular excesivo e hipertrofia de los ligamentos de las vértebras. Esta causa degenerativa es la más común, y está asociada al envejecimiento y desgaste de las estructuras de la columna vertebral.
¿Qué sensación manifiesta el paciente?
Los síntomas más frecuentes de la Estenosis Raquídea Lumbar son:
- Lumbociática recurrente
- Claudicación Neurogénica: este dolor suele ceder con un breve descanso
En cuanto a las áreas de la columna vertebral afectadas son la lumbar, seguida de la cervical. Estas regiones son propensas a experimentar un estrechamiento del canal raquídeo debido a factores degenerativos y de Envejecimiento.
Otros elementos se relacionan con Inestabilidad Segmentaria Vertebral, Anomalías Congénitas de la columna y Enfermedades Hereditarias.
¿Cómo aliviar el Dolor?
El tratamiento busca aliviar los síntomas y mejorar la calidad de vida del paciente. Las opciones van desde el uso de medicamentos para controlar el dolor y la inflamación, Kinesioterapia para fortalecer los músculos de la columna, y en algunos casos se pueden administrar corticoides para reducir la inflamación.
La cirugía se considera cuando los tratamientos no quirúrgicos no han logrado una mejoría permanente de los síntomas.
Riesgos de no tratarse
Este padecimiento empeora con el tiempo, ya que es una condición progresiva que tiende a estrechar aún más el canal raquídeo. Por esta razón, es importante buscar un diagnóstico temprano y tratamiento adecuado para controlar los síntomas y prevenir complicaciones.
Las revisiones periódicas con el Traumatólogo son necesarias.
A su vez, también puede disminuirse el riesgo o probabilidad de esta enfermedad si se realiza ejercicio físico cardiovascular como caminatas y bicicleta, mantener un peso adecuado y adoptar posturas correctas al sentarse y levantar objetos pesados.