La prisión de la delgadez: entendiendo la Anorexia Nerviosa
La Anorexia Nerviosa es un trastorno de la conducta alimentaria grave que se caracteriza por una intensa preocupación por el peso y la forma corporal.
¿Qué es la Anorexia Nerviosa?
La Anorexia Nerviosa es un trastorno de la alimentación, que se caracteriza por una alteración de la percepción de la persona que lo padece, ya que se ve a sí misma extremadamente gorda a pesar de poder estar “en los huesos”.
En general, las personas comienzan por sentirse disconformes con su imagen corporal y comienzan a hacer dieta, la cual se va haciendo cada vez más estricta hasta llegar a comer un trozo de lechuga durante todo el día. Y apoyándose en intensas prácticas deportivas y medicamentos como laxantes y diuréticos.
Este tipo de patología es difícil de tratar, ya que las personas consideran que están haciendo algo positivo por su salud y vida socio emocional, por lo que no se consideran enfermas. Y como son expertas en esconder el problema a la familia, entonces estos se tienden a dar cuenta de la dificultad cuando la Anorexia está muy avanzada, a través de síntomas como la Amenorrea o cuando la sorprenden casualmente desnuda.
Principales personas afectadas
Esto habitualmente afecta a mujeres dado las imágenes valoradas que nos dan los medios publicitarios, las cuales son de mujeres muy delgadas, sin formas definidas donde la ropa cuelga, más que mostrar las formas del cuerpo desarrollado de una mujer. Lo cual es publicitado en asociación a éxito social, por lo cual no es rara la asociación con satisfacción de sus necesidades de valoración, aceptación y éxito social “si soy como muestran las revistas”. Por lo mismo se tiende a dar más frecuentemente en personas inseguras, con Baja Autoestima y una alterada identidad que busca aprobación social; un elevado perfeccionismo, meticulosidad, alta exigencia, afán de logro y un control emocional estricto.
En otras ocasiones, la Anorexia puede ser de una gran Ansiedad y descontrol emocional, de personas que viven en situaciones de abuso y traumáticas y encuentran en la regulación de la comida la forma de controlar alguna cosa en sus vidas. En estos casos es posible que se asocie a Depresión, Trastornos de Ansiedad en especial Trastorno Obsesivo-Compulsivo y fobia social, Suicidalidad y Trastornos de la Personalidad.
En cuanto a las familias de personas con este problema tienden a ser disfuncionales, manteniendo relaciones aglutinadas, sobreprotectoras, rígidas, fallan en la resolución de conflictos y tienden a triangular al hijo anoréxico.
Efectos psicológicos de la Desnutrición
- Irritabilidad
- Ansiedad
- Desconcentración
- Introversión social
- Excesiva preocupación por sí mismo
- Depresión
- Labilidad del humor
- Indecisión
- Pensamiento obsesivo y conductas compulsivas
- Acaparaban comida
- Alteraciones del sueño
- Pérdida del interés sexual
Factores predisponentes
- Personalidad (perfeccionismo, Baja Autoestima)
- Trastornos Psiquiátricos
- Alteraciones biológicas (neurotransmisores)
- Eventos adversos (abuso sexual)
- Herencia
- Patrones de interacción familiar
- Ideal cultural de delgadez
Desafíos en el tratamiento
Lo más importantes es poder prevenir la presencia de este tipo de problemas, a través de enseñar a nuestros hijos e hijas a comer sano, así como estando atentos a su desarrollo emocional y social, de modo de poder ocuparnos a tiempo de sus molestias y quejas, sin mirar en menos aquellos comentarios que nos hacen de sus compañeros, que a ojos de un adulto pueden ser “tonteras” pero que a un niño sensible puede ser realmente marcador de su personalidad.
Además, es regla general, estar permanentemente atentos al comportamiento alimenticio de nuestros hijos, especialmente si son más inseguros, tímidos, perfeccionistas, inhibidos y controladores.
Posteriormente si ya posee la enfermedad, lo mejor es un tratamiento multidisciplinario partiendo de una hospitalización inmediata para equilibrar los síntomas y desequilibrios físicos y simultáneamente apoyarse con Psiquiatra, Psicólogo y otros terapeutas complementarios. En esta etapa el control y apoyo de la familia es clave, ya que no se puede estar seguro nunca de la persona, porque en cualquier descuido puede vomitar o hacer algo para rechazar la comida.
Posteriormente el control debe permanecer y además los familiares deberán evitar realizar cualquier tipo de comentarios en relación a la apariencia física como valor y/o al cuidado del propio peso. Se recomienda mostrar una actitud empática, en la que se intente comprender como se siente la persona que padece Anorexia y se actué de manera acogedora, evitando presiones indebidas.
Es importante que el ambiente al momento de comer sea lo más distendido posible, intentando que no tenga una duración mayor a 45 minutos, después de lo cual se retira el plato y se impide que ingrese al baño, al menos durante media hora después.