Malformación Arteriovenosa Cerebral (MAV): ¿Cómo elegir el tratamiento ideal?
Una Malformación Arteriovenosa Cerebral (MAV) es un tipo de anomalía congénita o adquirida en los vasos sanguíneos del cerebro.
Esta condición implica un desarrollo anormal que resulta en una conexión anómala entre las arterias y las venas.
Tipos de MAV y características clínicas
Existen distintos tipos de MAV y sus características clínicas varían según la ubicación y el tamaño de la malformación. Los principales síntomas son:
- Dolor de Cabeza
- Convulsiones
- Hemorragias Cerebrales
- Déficits neurológicos
- Alteraciones en la visión
Para llegar a un diagnóstico, el procedimiento común consiste en realizar estudios de imágenes cerebrales como una Resonancia Magnética con secuencia TOF. Otras pruebas a las que se puede someter una persona son Angiotac de Cerebro o Angiografía Cerebral.
Estas pruebas permiten identificar la localización y el tamaño de la Malformación Arteriovenosa Cerebral.
Riesgos, complicaciones y factores asociados
Como tal no existe una causa específica en el desarrollo de las MAV. Sin embargo, algunos factores pueden aumentar el riesgo de desarrollarla como los antecedentes familiares, anomalías genéticas y lesiones cerebrales previas.
La principal complicación asociada a una Malformación Arteriovenosa Cerebral es el riesgo de Hemorragia Cerebral, la cual puede causar Accidentes Cerebrovasculares, daño neurológico permanente e incluso, la muerte.
Intervención quirúrgica y otras opciones de tratamiento
En la actualidad, la Microcirugía Vascular es el tratamiento de elección en MAV de bajo grado. Cuando se trata de malformaciones de mayor grado, se puede abordar en conjunto con una Embolización. Es importante resaltar que el trabajo en equipo es fundamental en el tratamiento de esta patología.
Algunos riesgos que se asocian a la intervención quirúrgica incluyen Hemorragia, infección, daño neurológico y los problemas relacionados a cualquier procedimiento quirúrgico. La ventaja de este tipo de intervención tiene que ver con la prevención de futuras Hemorragias Cerebrales y la reducción de los síntomas o signos asociados.
La selección del tratamiento adecuado se basa en una evaluación completa de la Malformación Arteriovenosa Cerebral con información como tamaño, ubicación, sintomatología y riesgos asociados a cada opción de tratamiento. Para ello, es importante que participe en la toma de decisiones junto con un equipo médico multidisciplinario con especialidad en Neurocirugía Vascular.