Muerte óbito fetal
La muerte óbito fetal se define como la muerte de un feto (mayor a 20 semanas de gestación o mayor a 350 gramos sin signos vitales y sin respuesta a maniobras de resucitación) en el útero.
Dr. Alfredo Germain Aravena
En Chile este problema afecta entre 4.9 y 5.5 por cada 1,000 bebés que nacen vivos. Los principales factores que se asociación a la muerte fetal son:
1- Edad materna: Posterior a los 35 años el riesgo es de 1,28 y pasando los 40 años aumenta a 1,72
2- Paridad: el riesgo aumenta en los extremos, es decir, en las nulíparas (primer embarazo) y en las grandes multíparas (más de 5 hijos)
3- Obesidad: El riesgo es de 2.1
4- Antecedentes: Si una paciente sufre o pasó por una muerte fetal, el riesgo aumenta a que suceda nuevamente
5- Embarazos múltiples: Afecta debido a la asociación de enfermedades propias de gemelos (restricción de crecimiento o síndrome transfusión feto-fetal
6- Nivel socioeconómico: El tener un bajo nivel aumenta el riesgo debido a la desnutrición, obesidad o consumo de tabaquismo
¿Cuáles son las causas de la muerte fetal?
Las causas de dividen en maternas, fetales y placentarias.
Maternas:
- Síndrome hipertensivo del embarazo: afecta entre 6 y 12% de las embarazadas y es causa de muerte fetal en 4 a 9% de los casos, dependiendo del tipo de síndrome hipertensivo
- Diabetes mellitus: afecta al 5% de las embarazadas y en hasta un 18% de los casos de óbito fetal se puede encontrar diabetes en alguna de sus formas
- Enfermedades autoinmunes: afectan a menos de 1% de los embarazos y están asociadas a otras patolog.as, como síndromes hipertensivos, trombofilias
- Trombofilias: grupo de enfermedades que aumentan el riesgo de desarrollar eventos trombóticos. El peligro de presentar un óbito fetal depende del tipo de trombofilia, siendo más elevado en el síndrome Antifosfolípidos y en el déficit de antitrombina III
Fetales
- Infecciosas: Representan el 6-15% de los casos dependiendo de la edad gestacional. A menor edad gestacional la causa infecciosa cobra más relevancia
- Malformaciones fetales y alteraciones genéticas: Son la causa de aproximadamente el 25% de los casos
- Accidentes de cordón: La incidencia de circulares de cordón es de 14 a 30% de los embarazos. Sin embargo, los accidentes de cordón causan 1 a 2 muertes por cada 1.000 nacidos vivos
Placentarias
- Desprendimiento de placenta: Es la primera causa aislada de óbito fetal
- Transfusión feto-materna: Se trata de la incompatibilidad de grupos sanguíneos entre la madre y el feto, que produce la formación de anticuerpos de la madre que pasan la placenta y afectan a los glóbulos rojos del feto. Da cuenta de hasta un 15% de los óbitos fetales sin causa
¿Qué se debe hacer después?
Cuando una pareja perdió a su bebé es importante realizarse estudios para que ellos sepan el por qué sucedió eso y puedan evitar complicaciones en su siguiente embarazo. Se realizan estudios como una biopsia de placenta y autopsia del feto. Si la pareja decide volver a intentar un embarazo, este debe llevarse junto con ayuda psicológica para manejar la angustia durante el proceso, además de un monitoreo constante por parte del especialista en ginecología.
La monitorización del embarazo comienza en forma temprana, realizando una evaluación ecográfica con Doppler de arterias uterinas entre las 11 y 14 semanas para estimar el riesgo de aneuploidias (alteraciones cromosómicas) y evaluar la presencia de síndromes hipertensivos y restricción de crecimiento fetal. A las 20-24 semanas se repite el Doppler de arterias uterinas. Si ambos exámenes resultan normales, la probabilidad de presentar complicaciones es muy baja. Se recomienda realizar evaluaciones de crecimiento fetal a las 28 y 32 semanas; y desde las 34 semanas se recomiendan evaluaciones ecográficas semanales de la condición fetal. La interrupción del embarazo debe ser planificada entre las 35 y 38 semanas según el caso, o previamente si se sospecha deterioro de la condición fetal. Al igual que en el grupo de pacientes con aborto recurrente, este debe ser controlado por un especialista en medicina materno-fetal o reproductiva.