Obesidad y Sobrepeso: Un enemigo para la salud

Obesidad y Sobrepeso: Un enemigo para la salud

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Escrito por: La redacción de Top Doctors
Editado por: Miguel Angel Ortega Tapia el 30/05/2024

El Sobrepeso y la Obesidad son afecciones que se caracterizan por una acumulación excesiva de grasa que puede impactar gravemente en el estado general de salud.


Particularmente, la Obesidad es una Enfermedad Crónica que puede aumentar el riesgo de desarrollar diversas enfermedades como la Diabetes, Cardiopatías o algunos tipos de Cáncer. Además, esta condición afecta la calidad de vida y, en ocasiones, puede afectar la salud mental de la persona que la padece.


Clasificación de la Obesidad

El Sobrepeso y la Obesidad se diagnostican al calcular el Índice de Masa Corporal (IMC). Adicional a esto se pueden tomar en cuenta diversas mediciones como el perímetro de la cintura o la proporción de grasa en el cuerpo. La clasificación del IMC varía en función de la edad.


En la población adulta, las mediciones son:

  • Sobrepeso: IMC igual o superior a 25
  • Obesidad: IMC igual o superior a 30


En niños menores de 5 años el diagnóstico del Sobrepeso y la Obesidad se establece a partir de los valores normales de crecimiento y desarrollo. Cuando el peso, en función de la estatura, supera dos veces lo normal se considera Sobrepeso, mientras que cuando lo supera por tres se considera Obesidad.


Finalmente, en infancias y adolescencias de 5 a 19 años se utiliza el Índice de Masa Corporal como referente de estas condiciones.


Gradaciones de la Obesidad, desde leve hasta extrema

La Obesidad se clasifica en distintos grados a partir del IMC:

  • Obesidad grado 1: IMC de 30 a 34.9
  • Obesidad grado 2: IMC de 35 a 39.9
  • Obesidad grado 3: IMC igual o mayor a 40
  • Obesidad grado 4: IMC igual o mayor a 50


Las últimas dos clasificaciones son denominadas como Obesidad Mórbida y está asociada a múltiples complicaciones y enfermedades graves.


Diferencias entre la Obesidad general y la abdominal

Otra forma de clasificar la Obesidad es a partir de la distribución de la grasa. Existen tres tipos:

  • Obesidad Central: La grasa se acumula por encima de la cintura. Es el tipo de Obesidad más grave ya que se relaciona con un mayor riesgo de desarrollar Diabetes, Dislipemias y Enfermedades Cardiovasculares
  • Obesidad Periférica: La grasa se acumula por debajo de la cintura (caderas, glúteos y muslos). Esta enfermedad se asocia a diversas afecciones como la aparición de Várices o la Artrosis de Rodilla
  • Obesidad Homogénea: El exceso de grasa no está en una zona concreta del cuerpo, sino que se reparte de manera uniforme


Adelgazar el abdomen, la clave para una mejor salud

La grasa abdominal es especialmente peligrosa en el Sobrepeso y la Obesidad ya que, no sólo se limita a la capa de relleno por debajo de la piel, sino que también incluye la grasa visceral, la cual rodea los órganos internos.


Tener una gran cantidad de grasa abdominal, independientemente del peso de la persona, aumenta el riesgo de presentar:

  • Presión arterial elevada
  • Cantidad poco saludable de grasa en la sangre
  • Apnea del Sueño
  • Enfermedades Cardíacas
  • Altos niveles de Glucosa
  • Accidentes Cerebrovasculares
  • Hígado Graso
  • Muerte prematura

 

Estrategias efectivas para reducir la grasa abdominal

Algunas personas consideran que las flexiones y otros ejercicios enfocados en el abdomen son la solución para disminuir la grasa abdominal. Sin embargo, es importante señalar que deben acompañarse de estrategias complementarias para alcanzar este objetivo.


Para reducir la grasa abdominal y la grasa visceral se deben seguir las siguientes recomendaciones:

  • Dieta saludable: Que se enfoque en alimentos de origen vegetal, fuentes magras de proteína, limitar las carnes procesadas y grasas saturadas, y elegir cantidades moderadas de grasas monoinsaturadas y poliinsaturadas como las presentes en el pescado, frutos secos o aceites vegetales
  • Porciones: En ocasiones, aunque los alimentos sean saludables, las porciones son mayores a las necesarias. Es importante reducir las porciones para disminuir la ingesta calórica
  • Reemplaza bebidas azucaradas: La principal fuente de hidratación debe ser el agua o, en casos específicos, bebidas sin azúcar
  • Vida activa: Es necesario realizar actividad aeróbica moderada por lo menos 150 minutos a la semana y actividad aeróbica vigorosa por 75 minutos. Además, se deben realizar ejercicios de fortalecimiento cuando la meta es disminuir la grasa corporal


La pérdida de grasa abdominal es un proceso que requiere esfuerzo y paciencia. Es importante tratar de perder peso de manera lenta y constante con asesoramiento de una persona especialista en Nutrición.


Resistencia a la insulina y otras condiciones desencadenantes

La Obesidad se considera un factor de riesgo para el desarrollo de múltiples enfermedades y condiciones, una de ellas es la Resistencia a la Insulina. Esto es ocasionado por el aumento del tejido adiposo que acelera la producción de citoquinas proinflamatorias y que, junto a los ácidos grasos, son los responsables del desarrollo de esta condición.


La Resistencia a la Insulina se caracteriza por la incapacidad de esta sustancia de realizar sus funciones fisiológicas normales. Esta condición está relacionada con otras enfermedades como la Diabetes o el Síndrome Metabólico.


Otras condiciones de salud asociadas con la Obesidad

La Obesidad es un problema médico que aumenta el riesgo para muchas enfermedades y problemas de salud. Las más comunes son las Enfermedades Cardíacas, Diabetes, Hipertensión, Colesterol alto, Enfermedad Hepática, Apnea del Sueño y determinados tipos de Cáncer.


Además, se considera una comorbilidad que dificulta el manejo de algunas afecciones y es una posible contraindicación para someterse a procedimientos quirúrgicos u otras terapias.


Rol de la genética y otros factores en la predisposición a la Obesidad

Los genes pueden afectar la cantidad de grasa que una persona puede almacenar, además de determinar la distribución de ésta. Se ha demostrado que existe un factor genético en la capacidad del cuerpo para metabolizar los alimentos en energía, en la regulación del apetito y en la forma en que se queman calorías durante la actividad física.


Algunas enfermedades como el Hipotiroidismo, el Síndrome de Cushing o el Síndrome de Prader-Willi se consideran factores de riesgo para el desarrollo de la Obesidad. Además, algunos medicamentos pueden propiciar un aumento de peso cuando no se llevan con una buena alimentación o actividad física, como los esteroides, antidepresivos, medicamentos para la Diabetes, entre otros.


La Obesidad es una enfermedad que debe abordarse de manera multidisciplinaria. Algunas especialidades que deben intervenir son la Medicina Internista, Nutrición y Psicología. 

Medicina Interna