Realidad del VIH en Chile

Realidad del VIH en Chile

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Escrito por: La redacción de Top Doctors
Editado por: TOP DOCTORS® el 27/02/2020

Debido a que el virus no resiste a permanecer fuera del ser humano durante mucho tiempo, no es posible el contagio por contactos superficiales como un beso, usar el mismo baño, abrazar, etc.


¿Es lo mismo VIH y SIDA?

El Virus de la Inmunodeficiencia Humana o VIH es un retrovirus que infecta a las células del sistema inmunitario, ocasionando una alteración o anulación de sus funciones; es decir, provoca un estado de inmunodeficiencia en el paciente. Como consecuencia existe un mayor riesgo de contraer infecciones, cánceres u otro tipo de enfermedades.


Este virus afecta a los linfocitos CD4, un tipo de glóbulos blancos encargados de la creación de anticuerpos. Particularmente, un conteo normal de CD4 se mantiene entre 500 y 1600 células, uno por debajo de 200 indica un daño serio al sistema inmunológico y señal clara de la presencia del Síndrome de Inmunodeficiencia Adquirida (SIDA).


El síndrome es la etapa más avanzada de la infección por VIH. Puede tardar en manifestarse entre 2 y 15 años, si el paciente no se somete a tratamiento. Su presencia se suele diagnosticar si el paciente contrae alguna de las 20 infecciones o enfermedades oportunistas relacionadas al VIH como: Tuberculosis, Neumonía Bacteriana, Septicemia, Sarcoma de Kaposi o Linfoma.


Formas de contagio

Las maneras de contraer VIH son por vía sexual (intercambio de fluidos como semen o secreciones vaginales), sanguínea o vertical (de la madre a su hijo durante el embarazo, parto o lactancia). Debido a que el virus no resiste a permanecer fuera del ser humano durante mucho tiempo, no es posible el contagio por contactos superficiales como un beso, usar el mismo baño, abrazar, etc.


A nivel mundial la mayoría de los contagios se producen entre la población ya detectada y sus parejas sexuales. Otras tasas de infección se dan entre personas que se inyectan drogas (uso compartido de agujas o instrumentos punzantes) y clientes de servicios sexuales. De acuerdo a ONUSIDA (Programa Conjunto de las Naciones Unidas sobre el VIH/SIDA), la tasa de infecciones también está asociada a factores sociales como acceso a servicios de prevención, detección y tratamiento.


Virus en cifras

Según a datos de ONUSIDA, a finales de 2018 se contabilizaron 37.9 millones de personas detectadas con VIH; así como 1.7 millones de nuevas infecciones. Esta medida se redujo un 40% en comparación con las nuevas infecciones registradas en la epidemia de 1997.


Por otro lado, también en 2018, se registraron 770.000 decesos a nivel mundial a causa de enfermedades relacionadas con el SIDA, reducción importante en relación con los 1.2 millones de 2010. En contraste, 13.6 millones de personas salvaron sus vidas gracias al uso de antirretrovirales y cerca de un 53% del total de personas infectadas, habían logrado suprimir el virus y, por tanto, el riesgo de infectar a otros.


Chile al alza de VIH

Según el informe de 2018 de esta misma dependencia, en Chile había un total de 71.000 personas viviendo con VIH, cifra que aumentó en un 82% desde 2010. Se posicionó como el país con el mayor incremento de nuevos contagios (34%), seguido por Bolivia (22%), Brasil (21%) y Costa Rica (21%). Respecto a esto, la población de hombres mayores de 15 años fue la más afectada.


El Ministerio de Salud del Gobierno de Chile señaló que, entre enero y septiembre de 2019, se confirmaron más de 5 mil nuevos casos. De acuerdo a los Especialistas de la Sociedad Chilena de Infectología (SOCHINF), las principales causas de este incremento son la falta de educación sexual desde la infancia, desconocimiento de la prevención de enfermedades de transmisión sexual, pérdida del miedo de la enfermedad, cambio de la conducta sexual de los jóvenes, migración, entre otros.


Estos nuevos datos se obtuvieron con la campaña de diagnóstico emprendida por el Instituto de Salud Pública (ISP) a inicios de ese año, en donde los resultados eran proporcionados el mismo día de la prueba. Hecho que facilitó la vinculación de las personas con el tratamiento y la atención médica correspondiente.


Acceso a tratamiento

Hoy en día, gracias al acceso a la prevención, el diagnóstico, el tratamiento y la atención eficaces del VIH y de sus infecciones oportunistas, el Virus de Inmunodeficiencia Adquirida se ha convertido en un problema de salud crónico llevadero, que permite a las personas que viven con el virus llevar una vida larga y saludable.


En Chile, el Ministerio de Salud asegura que todas las personas que viven con VIH, independientemente de su nacionalidad o residencia, tienen derecho al tratamiento antirretrovírico que permite mantener controlado el virus y prevenir la transmisión a otras personas. La dependencia manifestó su compromiso con las metas mundiales de ONUSIDA, las cuales son: que el 90% de las personas con VIH sean diagnosticadas, 90% acceda a un tratamiento antirretroviral y que el 90% de estas mismas logre una carga viral indetectable. 


Infectología