Las células madre son las que originan todas las células del organismo, regeneran y reparan los tejidos dañados. Cuando las personas se desarrollan, una pequeña parte de células madre se quedan residiendo en distintos tejidos para cuando sea necesario. Las células madre adultas o células madre mesenquimales están presentes en la médula, los riñones, el corazón, el tejido adiposo, etc. De hecho la grasa es la mayor fuente de células madre mesenquimales.
El tratamiento se hace en dos tiempos. Lo primero es obtener el líquido o la grasa en la que hay células madre de la médula osea o de la zona definida. La muestra se envía a un laboratorio que la cultiva durante 3 semanas y sigue un proceso de selección para expandir esas células y generar 40 millones de células madre que serán transferidas al paciente.